¿Qué es IUExtremadura?
Izquierda Unida es un Movimiento Político Social y Cultural de carácter anticapitalista que se conforma en una Organización, política y jurídicamente soberana, cuyo objetivo es transformar el sistema capitalista económico, social y político y superar el patriarcado, en un sistema socialista fundamentado en los principios democráticos de justicia, igualdad, libertad, solidaridad, internacionalismo, democracia participativa respeto a la naturaleza y organizado conforme a un Estado Social y Democrático de Derecho republicano, laico, federal, plurinacional y solidario.
La soberanía de Izquierda Unida Extremadura reside en sus afiliados y afiliadas y se expresa en la Asamblea Regional, órgano que recoge y representa ante la sociedad el sentir unitario de la organización, compuesta por las personas delegadas para ese fin por sus compañeros y compañeras en las respectivas comarcas de acuerdo con las normas que se establezcan en cada caso. La soberanía también se expresa mediante los mecanismos de participación directa de la militancia, sean consultas referéndums o votaciones para la elección directa de órganos de dirección y cargos públicos mediante el sufragio universal, garantizando siempre la igualdad efectiva de oportunidades para el conjunto de su militancia.
La XII Asamblea Federal de Izquierda Unida definió en su documento político y organizativo las orientaciones que tenemos que adaptar a nuestra realidad regional y local
- Una izquierda de clase orgullosa de su bagaje histórico y que, al mismo tiempo, se inserta dentro de un bloque político más amplio y diverso. Es necesario articular y desarrollar el trabajo externo fuera de la dinámica institucional, es necesario implementar propuestas concretas que hagan de las sedes lugares de referencia útiles para nuestra clase y nuestro pueblo. Otro elemento importante es el refuerzo de una formación teórica y práctica continua mediante planes de trabajo
- Una izquierda que cuida a su gente, que se La afiliación a veces se entiende como un sacrificio, casi desde una perspectiva cristiana y militar. Si no conseguimos que la militancia sea algo más que sacrificio abnegado por un futuro mundo no seremos capaces de generar espacios amables donde crear comunidad. La izquierda se debe caracterizar por construir en el día a día, proyectos alternativos de vida frente al proyecto de muerte que ofrece el capitalismo. En vez de prometer un paraíso futuro debemos construir una nueva cotidianidad, un proyecto de vida entre todos y todas cada día: el bosquejo concreto y mundano de la nueva sociedad socialista a la que aspiramos. En el próximo mandato pondremos en marcha programas de afiliación específicos para nuestros mayores, para las personas jóvenes y para el conjunto de la afiliación. Para ello crearemos una responsabilidad de afiliación.
- La creación de comunidad no solo la hacemos con nuestra afiliación, también la construimos con nuestro entorno social y con nuestra gente. Hasta ahora hemos avanzado en la figura del simpatizante, sin embargo, la actividad del simpatizante se limita a la participación en procesos de primarias o de referéndums. Debemos incrementar la participación de los simpatizantes, pensando que algún día podrán ser militantes de Izquierda Unida. La participación en redes de activistas que se centren en el trabajo sectorial debería ser una oportunidad para ampliar la participación de los En ese sentido, en el próximo mandato potenciaremos la figura del simpatizante adscrito a las redes y áreas sin adscripción local.
- Una Izquierda Unida que conecte la acción institucional con la estrategia política del conjunto de la organización en todos los niveles. En el próximo mandato recuperaremos la comisión interparlamentaria anual donde la Colegiada Federal se reunirá con el conjunto de europarlamentarios, diputados nacionales, diputados autonómicos y alcaldías.
- Una izquierda con arraigo territorial y fortaleza municipal para insertarse en la cotidianidad de la clase trabajadora más allá de las estrecheces del institucionalismo. El refuerzo del trabajo de las Asambleas de base y el énfasis en el trabajo municipalista es uno de los retos del próximo mandato. Pondremos en marcha elementos de coordinación del ámbito municipal y que permita vincular el conjunto de la actividad institucional con nuestra base territorial. La intervención en los municipios no debe ser exclusivamente institucional y la coordinación deberá enfatizar el conocimiento de buenas prácticas a nivel municipal para reforzar y ampliar nuestra fuerza municipal.
- Una izquierda centrada en la articulación de sociedad civil, en la organización de los conflictos sociales y en la creación de espacios de socialización, que se sirve de las redes para conectar con los universos activistas. En los próximos años desarrollaremos las redes de activistas como el pilar social de la organización y la conexión con los conflictos. Para ello es necesario que se configuren como instrumentos flexibles de participación, elaboración y acción colectiva con implantación en la base, participación plural y no como secretarias constituidas desde Organizaremos un encuentro anual de las redes de activistas que nos permitan compartir las experiencias y poner en marcha nuevas iniciativas será un objetivo concreto de la dirección.
- Una Izquierda Unida que, desde un férreo compromiso con la creación de dinámicas de trabajo democráticas y fraternas no renuncia a su vocación hegemónica dentro del espacio de la izquierda transformadora.
- Una Izquierda Unida con una apuesta por el internacionalismo, no como declaración, sino como práctica política diaria. La división internacional del trabajo, la erosión de las democracias liberales-representativas, el camino hacia el autoritarismo y la estrategia de desechar a los países y clases más vulnerables, es una lucha global que articula nuestro proyecto de país hacia la redefinición del sistema”