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15 DE SEPTIEMBRE – PRIMERA MARCHA EN CONMEMORACIÓN DE LAS VÍCTIMAS DE LA COLUMNA DE LOS OCHO MIL EN EXTREMADURA

La Asociación 25 de marzo junto con otras organizaciones políticas, asociaciones y ayuntamientos y con la colaboración de Izquierda Unida Extremadura, organiza e impulsa la 'I Marcha Columna de los 8.000' el próximo 15 de septiembre en la localidad de Fuente del Arco.

La memoria histórica y la tragedia de la «Columna de los Ocho Mil»: un recordatorio del horror fascista en la Guerra Civil Española

Durante la Guerra Civil Española (1936-1939), el país fue testigo de numerosos episodios de desplazamientos masivos de la población civil, forzados a huir ante el avance de las tropas fascistas sublevadas. Estas huidas, motivadas por el miedo a la represión y la violencia, dejaron pueblos y ciudades despoblados, generando crisis humanitarias en diversas regiones. Entre los éxodos más conocidos está la retirada final de los republicanos hacia la frontera francesa en febrero de 1939, y la desesperada huida de Málaga a Almería en febrero de 1937, tras la entrada de las tropas franquistas en la ciudad andaluza.

Sin embargo, un desplazamiento menos conocido, pero no por ello menos trágico, fue el protagonizado por la llamada «Columna de los Ocho Mil», que tuvo lugar en septiembre de 1936 en el suroeste de la provincia de Badajoz. Ante el imparable avance de las tropas franquistas, aproximadamente ocho mil personas, en su mayoría campesinos, mujeres y niños, emprendieron una marcha desesperada hacia el noreste republicano de La Serena, en busca de refugio. Este éxodo representó uno de los primeros grandes desplazamientos de la guerra, y marcó el inicio de lo que sería una sucesión de masacres y represión a lo largo del conflicto.

La «Columna de los Ocho Mil» fue brutalmente diezmada en las cercanías de Fuente del Arco (Badajoz), cuando las fuerzas franquistas interceptaron la marcha tras dos días de agotadora caminata. Aunque muchos lograron escapar y continuar su huida, al menos dos mil personas fueron capturadas, trasladadas de vuelta a sus localidades de origen y posteriormente ejecutadas en un acto de venganza y terror sistemático. Este episodio, uno de los más dolorosos en la historia de la represión franquista en Badajoz, ha permanecido durante décadas en la sombra, olvidado o silenciado por las instituciones del régimen, que buscaron borrar cualquier rastro de la violencia desatada contra la población civil.

La importancia de recordar y reivindicar este tipo de hechos, como parte de la memoria histórica, radica en el reconocimiento de las víctimas de la guerra y la dictadura, así como en la necesidad de mantener viva la verdad de lo sucedido. El fascismo, que durante la Guerra Civil se erigió como la fuerza represora que combatía las aspiraciones de justicia social y democracia, dejó a su paso un rastro de dolor, sufrimiento y muerte que no puede ser ignorado ni minimizado.

Episodios como el de la «Columna de los Ocho Mil» son un recordatorio de lo que ocurre cuando las ideologías totalitarias se imponen mediante la violencia y la exclusión. Estos actos de terror no solo buscaban aplastar a los opositores, sino que también pretendían generar un estado de miedo permanente entre la población. A través de la historia, podemos ver cómo estos desplazamientos forzados, como el del sur de la provincia de Badajoz, se repitieron en otros momentos de la contienda, como la masacre de civiles en la carretera entre Málaga y Almería, donde miles de personas fueron bombardeadas mientras intentaban escapar de las tropas fascistas en lo que se conoce como La Desbandá.

La memoria histórica, como herramienta de justicia y reconciliación, nos obliga a mirar al pasado con honestidad y valentía, reconociendo las atrocidades cometidas, no solo para honrar a quienes sufrieron, sino también para aprender las lecciones que nos dejen construir una sociedad más libre, justa e igualitaria. El fascismo no puede, ni debe, ser nunca la respuesta a los problemas de una sociedad. Olvidar o restar importancia a hechos como el de la «Columna de los Ocho Mil» es abrir la puerta a que se repitan errores trágicos del pasado.

Hoy, al exhumar las fosas comunes y al arrojar luz sobre estos episodios ocultos durante tanto tiempo, no solo estamos devolviendo la dignidad a las víctimas, sino que también estamos reafirmando nuestro compromiso con una democracia inclusiva y plural, donde la justicia y los derechos humanos prevalezcan sobre cualquier ideología de odio.

MANIFIESTO ‘EXTREMADURA TIENE MEMORIA’: I MARCHA COLUMNA DE LOS 8.000

El 16 de septiembre de 1936 se produjo uno de los sucesos más importantes y, a la vez, más dramáticos de la historia contemporánea de Extremadura: tras el golpe de estado fascista del 18 de julio de ese mismo año, dos meses después, los últimos enclaves del suroeste extremeño estaban a punto de ser tomados por las tropas del ejército golpista. Ante esta situación, un grupo formado por miles de personas intenta escapar del terror y la muerte, huyendo de manera organizada hacia zona republicana. Muchas personas huían de sus pueblos por sus ideas políticas, otras simplemente por miedo. No sabían el terrible final que les esperaba.

Formaron lo que se denominó ‘la columna de los 8000’, en lo que fue el primero de los grandes desplazamientos de personas que provocó la Guerra Civil. La columna la conformaron, sobre todo, mujeres y hombres indefensos, niños y niñas, ancianos y ancianas, andando y cargadas con algunos enseres en carros y animales. Pocos iban armados. La huida fue a través de 100 kilómetros, partiendo de Fregenal de la Sierra y pretendiendo llegar al enclave republicano de Azuaga, una de las pocas zonas de la provincia que no había sido ocupada por el ejército fascista.

Cuando estaban ya cerca de la libertad, la columna fue atacada en un paraje cercano a Reina y Fuente del Arco, siendo asesinadas unas 80 personas. Tras este ataque, muchos miembros de la columna acabaron huyendo de nuevo hacia sus pueblos, donde fueron asesinados, y unas 2.000 personas de la columna fueron hechas prisioneras y fusiladas un mes después.

Sin embargo, a pesar de que estos hechos forman parte, junto con la matanza de Badajoz, de uno de los sucesos represivos más importantes de la Guerra Civil, hasta el día de hoy ha sido silenciado por los distintos poderes, los de antes y los de ahora, intentando que un manto de olvido, injusticia e impunidad cubra nuestra historia popular extremeña.

Silenciado en las instituciones educativas, este genocidio contra la población civil extremeña ha permanecido oculto para la mayoría de los y las extremeñas, y, sobre todo, para las generaciones actuales.

Esto, unido a que nuestra región cuenta con la segunda provincia del país, Badajoz, con el mayor número de personas asesinadas por el franquismo (en torno a 14.000 son las víctimas extremeñas y 12.000 las pacenses) y a que en la actualidad todavía más de 13.700 extremeños y extremeñas continúan desaparecidas en cunetas y en fosas comunes, hace que sea necesario poner en pie iniciativas para reconstruir nuestro presente a través de nuestro pasado.

Por todo ello, ante el auge de mensajes revisionistas de nuestra historia, que pretenden negar el genocidio cometido por el franquismo en nuestra tierra, y la llegada de estos mismos victimarios al actual Gobierno de la Junta de Extremadura, quienes pretenden derogar la actual e insuficientemente todavía desarrollada Ley de Memoria Histórica y Democrática de Extremadura, nuestra región se levanta para decir alto y claro que ‘Extremadura tiene memoria’, a través de la I Marcha Columna de los 8000’.

Esta jornada de lucha y memoria, impulsada por diferentes asociaciones, organizaciones y colectivos extremeños y personas a título individual, se celebrará el próximo 15 de septiembre, desde la ermita del Ara (Fuente del Arco) hasta Fuente del Arco. Nuestro objetivo es rescatar a la luz del presente este hecho histórico de nuestra región y denunciar los discursos negacionistas y revisionistas de la Memoria Histórica y Democrática.

Caminaremos, no sólo para rescatar la memoria de esas 8.000 personas, sino también para ser vacuna contra el machismo, el clasismo, el racismo y la lgtbifobia y, en definitiva, contra el fascismo, para las generaciones del presente, con el objetivo de seguir construyendo una cultura popular extremeña crítica, tolerante, diversa y progresista que traiga por fin Verdad, Justicia y Reparación, y no repetición.

Más información e inscripciones en: https://marchacolumnadelos8000.es/

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