El nuevo saqueo de Extremadura

 
Las multinacionales, las corporaciones y los fondos de inversión, mediante sus lobbies, han presionado a los Estados para planificar las decisiones políticas y económicas en función de sus intereses. Se han dotado de estructuras como el FMI, el BM, Organización Mundial del Comercio, los tratados internacionales de comercio y los tribunales de arbitrajes internacionales, imponiendo, entre otras cosas, la propiedad corporativa frente a la propiedad privada y el mercado intervenido frente al llamado mercado libre. Han conseguido la globalización de la economía y la distribución del trabajo a nivel mundial.
De esta forma, los países desarrollados, han externalizado las empresas contaminantes, incluida la minería, al Tercer Mundo, transformando esta parte del mundo en Zona de Sacrificio, asumiendo la contaminación y la destrucción del Medio Ambiente. Mientras tanto el mundo desarrollado ha gozado de un Medio Ambiente aceptable y un nivel de vida impensable para aquellos a los que se sacrificaba para conseguirlo.
El Capital invertido tiene que rentabilizar la inversión y solo lo puede crecer produciendo cada vez más. Cuando la tasa de ganancia disminuye se produce recesión, crisis económica, destrucción de la actividad y paro, pero las corporaciones salen beneficiadas aumentando las desigualdades, de tal forma que actualmente muy pocas personas, controlan la economía mundial. 
Es una paradoja hablar de capitalismo sostenible (si una economía no crece, no hay inversión) cuando se están sobrepasando los límites biofísicos del Planeta y produciendo una profunda crisis de recursos que limitan las posibles alternativa. Este problema, al igual que con la política actual de “Transición Verde”, harán que antes del 2050 se hayan agotado las reservas de litio, cobre y manganeso.Igualmente bajo la falacia de la minería sostenible o de la minería verde, se oculta que la minería es un contribuyente neto al Cambio Climático y a la destrucción de Medio Ambiente, causando el 10% de la destrucción de la Amazonía y responsable del 90% de la pérdida de biodiversidad así como del 23% de los gases de efecto invernadero del conjunto del planeta. 
Realmente estamos reemplazando la dependencia insostenible del petróleo, por otra también insostenible. 
Ante este panorama, la hoja de ruta propuesta por el Ministerio de Transición Ecológica y la Junta de Extremadura, no deja de ser una transposición de las políticas europeas, dictadas por el lobby de la minería, con el objetivo de disminuir la oposición social, lograr leyes favorables para la tramitación exprés de los proyectos mineros y facilitar la financiación pública de proyectos altamente especulativos. 
Extremadura y los extremeños siempre hemos sido Zona de Sacrificio para el desarrollo de España, de diferentes maneras: con una emigración masiva, mediante la exportación de productos con bajo valor añadido, la exportación de energía eléctrica producida en los pantanos y en la Central Nuclear. Ahora hemos cargado con lo más necesario para la transición Ecológica, las energía renovables, eólica y fotovoltaica que están ocupando campos de cultivo e impactan en el paisaje. Por si lo anterior fuera poco, la Junta de Extremadura quiere vender el subsuelo extremeño, afirmando que es rico en minerales, que somos tranquilos, que tenemos bajos impuestos y tasas para la inversión y que además bonificamos y subvencionamos este tipo de actividad. Dada estas condiciones se han solicitado más de 200 proyectos de investigación minera en Extremadura. 
(Los proyectos mineros destruirán la Extremadura que conocemos) Estos proyectos mineros destruyen nuestra forma de vida y nuestro potencial de futuro. Las minas destruyen la capa fértil de los campos, destruyen el paisaje con grandes cráteres, levantarán montañas de escombros, construirán grandes balsa de lodos tóxicos, contaminarán el aire con polvos en suspensión debido a las explosiones, contaminaran las aguas superficiales y subterráneas. NO podemos olvidar que el agua es un bien preciado y escaso; el agua es imprescindible para el consumo humano, para los animales, para la agricultura, para la vida. Sin agua no hay vida. 
La minería es intensiva en capital y escasa en creación de puestos de trabajo, de los cuales muy pocos son no cualificados, y los que crean son para pocos años. No se tiene en cuenta los puestos de trabajo que destruye en los sectores productivos. 
Por otra parte, la producción de concentrado de minerales extraídos en Extremadura son enviados generalmente para China. 
Las minas destruirán el potencial que tenemos para un desarrollo sostenible. Nuestra mayor fuerza, después del saqueo a que hemos sometido es lo que nos ha quedado: un paisaje maravilloso, el cielo claro, la atmósfera limpia, el patrimonio histórico, su agricultura, su ganadería y sobre todo sus gentes. 
Es por todo lo anterior que IU de Extremadura en defensa del Medio Ambiente, por un desarrollo sostenible y por la salud de su población. Analizará cada actividad minera en todo el territorio de Extremadura; propondrá la modificación de la pre democrática Ley de Minas. 
Exigimos la transparencia total de los procesos de otorgamiento de los proyectos mineros y denunciamos los incumplimientos del convenio de Aarus y la propia ley de Información Medio Ambiental. 
Luchará porque los procesos que comprometen el futuro de país, no esté en mano de un gobierno que es nombrado por cuatro años, sino que la ciudadanía se responsabilice mediante referéndum de su propio futuro. Así como estudiar la viabilidad de la extracción pública de los recursos naturales en los casos en los que sea posible dicha extracción.

Coordinadora Regional de IU Extremadura